Las llamadas de spam se han convertido en un problema cotidiano para miles de usuarios de teléfonos celulares. Comunicaciones no deseadas, promociones dudosas y estafas disfrazadas de ofertas legítimas interrumpen diariamente la rutina de muchas personas. Frente a este panorama, una técnica poco conocida promete ser una solución eficaz sin recurrir al bloqueo de números ni al modo avión.
Lejos de las estrategias más comunes como cortar rápidamente, ignorar las llamadas o desconectarse por completo, una experta en telemarketing sugiere un enfoque más directo y sorprendente: atender la llamada y pedir de manera educada que se elimine el número de la base de datos.
El consejo fue brindado por Eléonore Bounhiol, trabajadora francesa del sector, quien explicó que muchos sistemas automáticos marcan como “activos” a los contactos que no responden. Es decir, que ignorar la llamada puede resultar contraproducente y derivar en más intentos por parte del sistema.
Una técnica simple que puede marcar la diferencia
Según Bounhiol, el truco está en la cordialidad y la firmeza. Basta con responder la llamada y expresar, sin agresividad, el deseo de no recibir más comunicaciones. En muchos casos, tanto operadores humanos como softwares automáticos registran este pedido y eliminan el número de los listados de llamadas futuras.
Por el contrario, colgar sin hablar o activar el modo avión no detiene el problema: los sistemas automatizados interpretan cualquier tipo de actividad como una señal de interés, lo que refuerza los intentos posteriores.
La especialista también advierte sobre la importancia de no brindar información personal, incluso si el interlocutor ya parece conocer ciertos datos. Y subraya que el maltrato a quien realiza la llamada puede entorpecer el proceso, dificultando la remoción del número del sistema.
Con una actitud respetuosa pero clara, es posible reducir significativamente la frecuencia de estas molestas comunicaciones. Un pequeño gesto que, según los expertos, puede hacer una gran diferencia.